El gobierno recién electo de Ricardo Martinelli aún no toma posesión, pero los nombramientos que ha hecho y las primeras declaraciones de algunos nuevos funcionarios dejan entrever que el “verdadero cambio” prometido se reduce a un cambio de caras, pero no de esencia. Por eso la tónica, una vez pasadas las campañas sucias de las elecciones, son los piropos mutuos entre Martinelli y Martín Torrijos.
El nuevo gabinete, al igual que el saliente, no sólo responde a los grandes intereses empresariales y financieros, sino que su composición es esencialmente oligárquica, blanca, patriarcal y elitista. Además, algunos funcionarios designados evidencian falta de idoneidad para los cargos que ejercerán, dándose a entrever que ha prevalecido, como siempre, el reparto de la cosa pública como si de un pastel se tratara.
Ni hablar de la política económica y social, en la que la única propuesta clara es la disminución de los impuestos a los ricos mediante la eliminación del CAIR y el Flat Tax, sin que por ningún lado se avizore el anhelo popular a aumento general de salarios, congelación de la canasta básica, creación de empleos, ni protección a la producción agrícola e industrial nacional.
Nuevo gabinete: los ratones cuidando el queso
Sólo por mencionar algunos ejemplos, tenemos que: el nuevo responsable de Economía es Alberto Vallarino, banquero al que el gobierno de Torrijos le exoneró $ 400 millones en impuestos cuando vendió Banistmo a HSBC; el director del Banco Nacional de Panamá, Darío Berbey, viene de la gerencia de Global Bank, banco del propio Martinelli; en la Caja de Ahorros, Jason Pastor, es de Scottia Bank; el jefe de la Secretaría de Energía viene directo de la gerencia de ETESA; y el nuevo jefe de ETESA de la comercializadora de Bahía Las Minas; el Ministerio del Canal fue entregado a Rómulo Roux, representante del poderosos bufete Morgan y Morgan; y el MOP a Federico Suárez de la Constructora Suárez.
Entre los que carecen de idoneidad y experiencia para los cargos resaltan: Guillermo Ferrufino en el MIDES, Lucy Molinar en Educación; Gloria Moreno de López en Aduanas; y Javier Arias en la ANAM. En política social el gabinete está controlado por miembros de la logia del extremismo católico, el Opus Dei, enemiga a muerte de los derechos de las mujeres y los niños, a través del vicepresidente J. C. Varela y L. Molinar (La Estrella 22/5/09).
Consideración especial merece el equipo de seguridad pública que, con Gustavo Pérez a la cabeza, y la colaboración de Ramón Díaz y otros (La Prensa, 6/5/09), fueron parte de la élite del General Noriega (UESAT) durante el régimen militar. Por ello José R. Mulino (Mingob) amenaza con que “no permitirá cierres de calle”. Para que todo quede en familia, el nuevo secretario “anticorrupción”, es el primo de Martinelli, y ex empleado de todos los gobiernos anteriores, Núñez Fábrega.
Medidas económicas: quitarle a los pobres para darle a los ricos
La única promesa ratificada por el presidente electo es la disminución de los impuestos a las clases altas y grandes empresas eliminando el CAIR, equiparándolos a las clases medias con el llamado Flat Tax, es decir que todos paguen igual. Pero, como las cuentas no cuadran, por la crisis económica y el alto endeudamiento dejado por el PRD, han propuesto eliminar los “subsidios”, entre los que está el de la electricidad, que podría conducir a un aumento de la factura de luz. Otra amenaza que se cierne sobre miles de empleados públicos es la posibilidad de despidos masivos. En educación y salud pretenden la privatización mediante “patronatos”.
Nada de hablar de nacionalizaciones, ni de control de precios, ni mucho menos de aumento salarial, ni siquiera de incentivos al agro. La única propuesta “social” son los prometidos 100 balboas a los mayores de 70 años no jubilados. ¿Por qué sólo cien, si la canasta alimenticia está llegando a los 300 balboas? ¿Por qué a los 70 años si la edad de jubilación es a los 62 para los hombres y 60 para las mujeres? ¿Cuántos ancianos sin recursos pueden sobrevivir hasta los 70 años?
En los últimos días trascendió en los medios que el cerebro en la sombra del nuevo gobierno, y madre de la alianza Martinelli-Varela, la embajadora de Estados Unidos, reunió al presidente electo para dictarle la agenda: aprobación del Tratado de Libre Comercio (TPC), que implica condena a muerte de nuestra agricultura a 20 años plazo; reformas al Código de Trabajo y otras “bellezas”.
Frente a la crisis se requiere un Plan de desarrollo alternativo
Las pocas medidas anunciadas por el gobierno electo de Ricardo Martinelli son claramente inconvenientes y no sacarán al país del atolladero en que nos han metido 5 años de gobierno del PRD y 20 años de políticas neoliberales. En el marco de la crisis capitalista internacional, las medidas de Martinelli favorecen a la oligarquía financiera y comercial, y empobrecen a las clases medias y trabajadoras.
Junto al Prof. Juan Jované, el Partido Alternativa Popular ha sostenido que se requiere un Plan Nacional de Desarrollo Alternativo, que apunte a fortalecer y salvaguardar el mercado interno, expandiendo el poder adquisitivo de los asalariados con un aumento general de salarios y una congelación de la canasta básica. En vez de falsas esperanzas en el sector exportador de bienes y servicios, golpeado por la crisis mundial, hemos propuesto fomentar la producción agrícola e industrial nacional para el consumo interno.
Alertas y construyendo la alternativa popular e independiente
Los hechos muestran que el movimiento popular no puede depositar un ápice de confianza en el nuevo gobierno y sus medidas. En vez de “compás de espera”, o “luna de miel de cien días”, las amenazas que se ciernen sobre los derechos democráticos y sociales del pueblo panameño obligan a los gremios y movimientos sociales, como la Unidad de Lucha Integral del Pueblo (ULIP), a estar alertas, organizados y coordinados para denunciar y enfrentar las medidas antipopulares que pretenda imponer el nuevo gobierno.
Esta actitud combativa debe ser extensiva hacia los personeros del gobierno saliente y su partido, PRD, que ahora intentarán reciclarse como “oposición”, prometiendo lo que no hicieron en 5 años. Los torrijistas honestos deben sacar la conclusión definitiva de que no tienen nada que esperar de la cúpula corrupta del PRD.
El Partido Alternativa Popular exhorta a todas las fuerzas populares, no sólo a ser contestatarias frente al gobierno de los ricachones que se inicia, sino a ser propositivas y darle forma al partido político que levante las demandas populares y que aspire a ser gobierno, una vez que todas las ilusiones en los partido oligárquicos se han desvanecido. Partido que ya hemos iniciado, Alternativa Popular (PAP), del cual retomaremos su inscripción en 2010 con el objetivo de tener una propuesta real de los sectores populares e independientes en las próximas elecciones.
Junto al Comité de Campaña “Jované Presidente”, demostramos que estamos preparados para ser alternativa de gobierno. Alternativa verdaderamente independiente que a lo largo y ancho del país recibió de muchos sectores populares y de clase media su confianza.
Profundicemos esta experiencia, convoquemos a nuevos sectores, y sin sectarismos, construyamos la unidad popular que el momento reclama, contraponiendo a cada medida antipopular del gobierno de los ricos, las propuestas justas que el gobierno de los sectores independientes, populares, nacionalistas y antineoliberales sí podrá tomar. Construyamos el verdadero cambio.
Panamá, 23 de mayo de 2009.
Partido Alternativa Popular
Comité Ejecutivo
sábado, 23 de mayo de 2009
Gobierno de Ricardo Martinelli, ¿cambio de qué?
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